Cristiana
En la primavera de 1212, todos los caminos de la península cristiana, llevaban a Toledo, lugar de partida para la cruzada contra los almohades. Caminos no solo llenos de Nobles a caballo, seguidos de sus mesnadas, sino de pobres que mendigaban por el camino y de personas no útiles para guerrear, como mujeres, jóvenes , que acompañaron al ejercito compartiendo sus privaciones y suerte hacia la batalla.
En Toledo se juntaron todos a finales de primavera y desde allí partieron el 19 de junio en dirección a los pasos de Sierra Morena, tardaron un mes en llegar. El primero en llegar fue Pedro II de Aragón (1178-1213) al frente de mas de 3000 caballeros con sus correspondientes mesnadas. A principios de junio llegaron los cruzados del extranjero en su mayoría franceses, pero también italianos lombardos y alemanes
La cabeza del ejercito estaba formada por los cruzados franceses, Las tropas del Obispo de Nantes, y de los Arzobispos de Burdeos y Narbona al mando de Diego López II de Haro (1152-1214). En su marcha, el 24 de Junio, asaltaron y pasaron a cuchillo a toda la población del Castillo de Malagón en Ciudad Real, fortaleza en manos de los Almohades.
El cuerpo central del ejercito estaba formado por las tropas aragonesas y catalanas acompañadas de los caballeros templarios.
En la retaguardia las tropas castellanas, Portugal y León a cargo de Maestres del los caballeros templarios y de la Orden de San Juan.
El 20 de Junio tomaron el castillo de Malagón y una vez tomado los Franceses incumplieron el pacto de entregarlo a cambio de las vidas de sus moradores y los mataron a todos, cosa que no gusto demasiado al grueso del ejercito formado por caballeros peninsulares.
El 29 de junio, una vez reagrupadas todas las tropas, tomaron el castillo de Calatrava. Aquí se produjo una primera desavenencia, loa mayoría de los franceses abandonan la cruzada, al no estar de acuerdo con el Rey Alfonso VIII (1155-1214) de perdonar la vida a los Musulmanes y dejarles marchar. Solo se quedaron las tropas Francesas al frente del arzobispo de Narbona y el Señor de Poitou. Esto dejó mermado el ejercito cruzado en un tercio del inicial.
En Calatrava descansaron y se repusieron del largo trayecto y al mismo tiempo se unió, al contingente, el Rey Sancho VII de Navarra (1194-1234) al frente de unos 200 caballeros y sus peones.
Los días 7,8 y 9 los cristianos acamparon frente a Salvatierra en manos Musulmanas.
El día 11 acamparon en Fresnedas, Desde donde se envío a Lope Díaz II de Haro (1170-1236), hijo de Diego López II de Haro (1152-1214), para que reconociese en terreno de Despeñaperros y ocupase su meseta, desde donde podían divisar el Castillo de Ferral, frente al desfiladero de la Losa, donde estaba acampado el grueso de los ejércitos musulmanes.
Los días 12 y 13 de Julio llegaron a la zona el resto del ejercito, reforzaron a los que estaban en la meseta.
Los Musulmanes dominaban todos los desfiladeros. Este dominio de los desfiladeros, hizo que los cristianos dudaran de su victoria, ya que adentrarse en ellos podía considerarse un suicidio.
Hubo diferentes posturas ante este problema, los Reyes Navarro y Aragonés se inclinaban por retroceder y buscar un paso mas seguro, el Rey Castellano se negaba, convencido de que si retrocedían podría producirse una deserción en masa. Al final decidieron cruzar Despeñaperros. Según las crónicas de la época un pastor les ayudo a cruzarlo por un paso que los musulmanes no podían atacar, que desembocaba en la explanada entre Mesa del Rey y Santa Elena. Los cristianos acamparon es esta gran explanada, donde se acordó el orden de batalla.
Musulmana
Tras la ruptura de las treguas con los cristianos, los musulmanes en 1209 al mando del Califa Miramamolín (?-1213)ordeno preparar todos sus ejércitos del norte de África, para una guerra a gran escala en Al-Andalus. En 1211 cruzo el estrecho desde Marrakech y estableció su sede en Sevilla, así mismo toma un fortificación muy importante estratégicamente en la ruta hacia Toledo, Salvatierra.
Avanzo hacia Sierra Morena, distribuyendo avanzadillas en los desfiladeros de Despeñaperros.
El califa acampó en el Castillo de Ferral, frente al desfiladero de la Losa, donde posiciono gran parte de su ejercito, decidió hacer lo mismo que su antecesor, esperar a los ejércitos cristianos y aprovechar el desgaste y cansancio de los castellanos y el favorable campo de batalla, ocupando posiciones ventajosas en los desfiladeros.
La guarnición del Castillo de Ferral, a la llegada del ejercito cristiano, decidió abandonarlo, pero tenían bien cubierto el paso del desfiladero, siendo suicida un ataque cristiano por ese lugar.
Los almohades cuando se vieron acampados frente al campamento cristiano, decidieron no esperar y atacar aprovechando que los cristianos estaban agotados de la marcha. Dispuso a su ejercito en orden de batalla, situándose favorablemente en el terreno y mandando atacar a columnas de caballería y arqueros, para intentar que los cristianos entraran en combate, estos no cayeron en la trampa y ese día no hubo batalla.
El día 15 los soldados almohades, amanecieron en formación de combate, esperando a los cristianos, pero al mediodía decidieron descansar ante la negativa de l ejercito cristiano a plantar batalla, los dos ejércitos se limitaron a planificar , calculando la fuerza y disposición del ejercito contrario, para intentar obtener ventaja el día de la batalla.
Todos intentaron descansar, como buenamente pudieron, ya que se avecinaba al día siguiente la gran batalla de las Navas de Tolosa